Tratamiento | Tasa de éxito por ciclo | Tasa de éxito acumulada tras 3 intentos |
Inseminación artificial con semen de pareja | 15-20% | 45-50% |
Inseminación artificial con semen de donante | 25-30% | 60-65% |
Fecundación in vitro con ovocitos propios | 35-40% | 75-80% |
Fecundación in vitro con ovocitos de donante | 60-65% | 85-90% |
Estas tasas de éxito son las publicadas por Clínicas EVA en su página web, y se basan en datos de pacientes tratados en 2022.
Es importante tener en cuenta que las tasas de éxito pueden variar en función de varios factores, como la edad de la mujer, la calidad de los óvulos o la calidad del semen. Por ello, es recomendable consultar con un especialista para obtener un pronóstico más preciso.
A continuación, se explica en detalle cada uno de los tratamientos mencionados en la tabla:
* Inseminación artificial: Este tratamiento consiste en la introducción de espermatozoides directamente en el útero de la mujer. Se puede realizar con semen de la pareja o de un donante.
* Fecundación in vitro: Este tratamiento consiste en la fecundación de un óvulo por un espermatozoide en el laboratorio. Los embriones resultantes se transfieren al útero de la mujer.
En el caso de la inseminación artificial, las tasas de éxito son más bajas que en el caso de la fecundación in vitro. Sin embargo, es un tratamiento menos invasivo y costoso.
En el caso de la fecundación in vitro, las tasas de éxito aumentan si se utilizan óvulos propios de la mujer. Sin embargo, si la mujer tiene problemas de fertilidad, puede ser necesario recurrir a ovodonación.
* Estos datos sobre tasas de éxito pueden estar desactualizados o ser erróneos, contacte con el centro para recibir la información que desee.
Nos decidimos por la clínica por recomendación de unos conocidos y por ser la más asequible. Cada caso es diferente y tiene unas necesidades concretas y por eso, yo no puedo recomendar una clínica, pero sí contar nuestra experiencia y sobre todo qué aspectos no tuvimos en cuenta y que ahora valoraría muchísimo. Escoger una clínica es una decisión muy personal de la pareja o persona que busque empezar un tratamiento. Puede ser un momento de mucha vulnerabilidad, altibajos, inseguridades, tristeza y emoción.. No deja de ser una experiencia dura y que puede hacerse muy larga. Nuestro proceso empezó en marzo de 2022. Algo que no tuvimos en cuenta son los protocolos y actuaciones por parte de laboratorio: Las recomendaciones son transferir solo 1 embrión para evitar embarazos múltiples. Nosotros obtuvimos 3 embriones y dos de ellos los congelaron juntos. Nuestro consejo es que desde el primer momento solicitéis que los congelen todos por separado, si así lo deseáis. No nos preguntaron si queríamos vitrificar los embriones juntos o por separado y aunque, nos explicaron que en nuestro caso era porque ambos habían llegado a día 5 al mismo tiempo, hubiéramos preferido vitrificarlos por separado. En la primera transferencia me transfirieron un embrión de calidad C en día 6, cuando tenía otros 2 de mejor calidad (A y B) en día 5. Nos lo comunican el mismo día estando ya en la clínica y tuvimos que esperar 1 hora a que lo descongelaran. Nuestra sensación fue que hubo falta de coordinación y consideraron transferir el de día 6 de calidad C que había sido congelado por separado, pero lo lógico para nosotros era que transfirieran primero el de mejor calidad. Quedamos descontentos y aunque intentamos confiar en ese blasto, no tuvimos una experiencia satisfactoria y nos generó desconfianza. La beta salió negativa. Después de esa experiencia nos surgieron algunas dudas que queríamos resolver para seguir adelante, así que solicitamos hablar con alguien de laboratorio. Algo que, al parecer es poco común en las clínicas. En nuestro caso, tuve que pedirlo expresamente para preguntar algunos datos sobre mis embriones y mi transferencia. Estuvimos insistiendo algunas semanas hasta que nos llamaron y pudimos resolver nuestras dudas. Lo agradecimos porque tener toda la información nos dejó más tranquilos y me ayudó a hacer el duelo. Algo que hubiéramos agradecido mucho, es que mi pareja formara parte más activa del proceso, y le hubieran dejado entrar a quirófano el día de la transferencia (algo que se permitía antes de la pandemia). Cuando te transfieren un embrión que es de ambos y te encuentras sola, la ilusión no es la misma. Solo te dejan grabarlo en vídeo. Para nosotros era importante vivir ese momento juntos. Intentamos solicitar que nos dejaran entrar a los dos, y aunque previamente nos dijeron que podíamos consultarlo con el director, en el último momento no nos dieron la opción de hablar con él para expresarle nuestro deseo. Nos sentimos decepcionados. Con el trato nos sentimos agradecidos por la profesionalidad y atención recibida por parte de Juan y María. Te transmiten seguridad y confianza en todo el proceso. Conseguimos la beta positiva en el segundo intento y ahora tenemos a nuestro bebé con nosotros y hemos formado una familia. Así es como vivimos y sentimos nuestra experiencia. Esperemos que sirva para las personas que necesitan decidirse y la clínica valore estos aspectos que nosotros consideramos muy importantes para tener una experiencia más satisfactoria.